Los sabores son muy curiosos.
Pueden ser tan dulces como cualquier cosa que venga de su boca, tan amargos como una derrota en el estado más vulnerable o tan ácidos como el limón que me hace cerrar un ojo de lo agrio, pero igual, me encanta.
(Mañana bailamos, wii!)
miércoles, 28 de abril de 2010
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Mmmm me encanta el limón ♥ lo como solo. al principio me daba como cosita por lo ácido, pero después me re acostumbre jaja. De vez en cuando como.
ResponderEliminarMe gusta esto que escribiste :)
un beso.